Al diablo los buenos modales, la falsa respetabilidad y todas aquellas personas que viven con cinismo sus tristes vidas ...
Un torbellino de pensamientos, deseos obscenos, una obsesión, de ese algo indefinible que siempre hemos ocultado, el erotismo desenfrenado, la pornografía casi…
Me gusta la pornografía y amo el erotismo…
Entiendo que no es normal vivir en mi locura.
Sasha Indomable
¿Por qué ocultar algo? cuando yo misma muestro mi más grande desprecio hacia la hipocresía, cuando además me divierte esta manera de comunicar aquello que he vivido personalmente envuelto con la magia de la imanación, esto hace que lo disfrute, incluso que mi sangre hierva y se agite, con los detalles más escabrosos que puedo llegar a inventar y tomar prestados para mis vivencias, de las cuales no me avergüenzo.
Creo que mis circunstancias particulares han formado mi carácter y quitado los velos de la clandestinidad en que se suele vivir la sexualidad y más sobre todo desde el lado femenino.
Desde muy joven me entregue al descubrimiento del placer y al deseo de conseguirlo y ahora me doy cuenta que detrás de todo ello, dentro de esa pequeña exploradora, se encontraba una sumisa, pese a mi carácter fuerte y rebelde.
¿Qué es ser una sumisa? Quizás la forma de amor más grande.
En la sombra de lo clandestino.
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Los fragmentos de mi alma.
-Dejame mostrarte lo que deseas.
Tus deseos, tus fantasías, tus ambiciones, tus secretos.
Abrió sus brazos para protegerme, entró en mi mente y la hizo suya, viví mis deseos en solo unos minutos, volé hacia la felicidad como nunca había hecho.
-Toma mi mano, sígueme.
Mire sus ojos claros y temblé de miedo, vencida me fui a su lado y conocí el porqué de mis sentimientos, sin duda , nadie como ÉL.
Olvide todo lo vivido, sin pasado, comenzando todo de nuevo.
Desde ese momento no tengo paz. Fue el día que entregue mi alma.
Ahora, no puedo recuperar esa parte perdida, mi búsqueda continua, intento olvidar, llenar este vacío.
Luchó por recuperar los fragmentos de mi alma, al tiempo que no dejo de añorar …